Estoy pronta a cumplir 48 años. Creo que es importante decirlo porque es en este momento de la vida que puedo ver y nombrar mi pasión. Antes podía sentirla, pero no podía nombrarla ni verla: como si fuera una niña en el vientre de su madre, la alimentaba, la sentía crecer, depender de mí, transformar mi cuerpo y mis emociones, pero tenía que llegar el parto para que la pudiera ver.

Ahora la estoy viendo en cada cosa que hago. Mi Pasión es el Collage: vivo haciendo collage desde que tengo memoria. Me gusta superponer, combinar, pegar, pintar, juntar, cruzar diferentes mundos en un proyecto para que surja otro. El Color, las Texturas y la Palabra son parte del juego, siempre.

Vivo con pasión y de mi pasión.
Soy una mujer que se fue construyendo en collage.
Una mamá que educa a su hijo en collage.
Una profesora de Historia que enseña haciendo collage.
Una artesana que cose, pinta, amasa barro, pega papeles, inventa historias haciendo collage.
Mi casa es un collage, mis cuadernos de clase son un collage, mi biblioteca es un collage, mis producciones artísticas son un collage, mi música es un collage, me visto en collage.
Recién ahora lo veo, y disfruto cada vez más conscientemente el proceso de creación. Es como un viaje que proyecto desde el interior y que concreto con las cosas que voy eligiendo del mundo.

Me inspira cualquier cosa: ahora, unas latas vacías de tomate, que pronto serán parte de un trabajo. Me gusta mucho poner el ojo en lo que me rodea cotidianamente, amo también los libros de cuento con buenas ilustraciones, que es lo único que colecciono.

Creo que la pasión tiene que ver con nuestro propósito en la vida, me gusta preguntarme por mi propósito (¿será lo mismo que misión?). Estoy para animar a otros/as a que se animen: con mi forma de hacer del collage los invito a plantarse en el mundo siendo quienes somos. Me gusta el Collage porque no tiene límites, siempre está con hambre, es curioso, se aburre si te repetís, es para ricos y pobres, para chiques, para grandes, es jugar hasta cuando cocinás, y te permite dormir en paz sabiendo que nuestra pasión quedó expuesta a lo largo de la jornada en todo lo que hicimos.
Soy Yanina Cid, hija de Ghelly y de Miguel, mamá de Matías, y tan loca como se pueda ser sin poner al mundo en peligro.

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